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Guía práctica para prepararte y recuperarte después de la extracción dental

​Sabemos que la idea de una cirugía dental puede causar un poco de nervios, pero no te preocupes: estamos contigo en todo momento. Esta guía está pensada para que te sientas tranquilo, preparado y bien informado.

Aquí encontrarás todo lo que necesitas saber antes y después de tu procedimiento, con consejos sencillos para que tu recuperación sea rápida, cómoda y sin contratiempos.

Antes de la extracción: ¿Cómo me preparo?

  1. Sigue las indicaciones de tu dentista.
    Puede que te recomienden evitar ciertos medicamentos (como anticoagulantes) o comer algo ligero antes, según tu caso.

  2. Ven acompañado.
    Siempre es buena idea que alguien te acompañe, especialmente si te sientes un poco nervioso o te cuesta manejar después de los tratamientos.

  3. No vengas en ayunas (a menos que te lo indiquen).
    En extracciones simples, es importante que hayas comido algo ligero al menos 1 o 2 horas antes.

  4. Trae ropa cómoda y ligera.
    Esto te ayudará a estar más tranquilo durante el procedimiento.

  5. Si te mandaron antibiótico antes de la cita, síguelo al pie de la letra.
    Es importante tomarlo como se te indicó para evitar infecciones y asegurar una buena recuperación.

  6. Relájate.
    Es normal sentir un poco de nervios, pero estamos aquí para cuidarte. Puedes traer audífonos con música si eso te ayuda a sentirte mejor.

Después de la extracción: Cuidados importantes

  1. Muerde la gasa y no la retires antes de tiempo.
    Mantén la gasa que colocamos sobre la herida durante al menos 30 a 45 minutos. Ayuda a formar el coágulo que detiene el sangrado.

  2. No escupas, no enjuagues, no uses popote durante 24 horas.
    Evita cualquier succión o presión que pueda desalojar el coágulo. Esto es clave para prevenir complicaciones como la alveolitis.

  3. Aplica frío en la zona externa.
    Puedes usar una bolsita de hielo envuelta en una toalla. Aplícala durante 15 minutos, descansa 15 y repite, durante las primeras 24 horas.

  4. Duerme con la cabeza un poco elevada.
    Usa una almohada extra esa noche para reducir inflamación y evitar molestias.

  5. Aliméntate bien, pero con alimentos blandos y fríos.
    Puré, yogur, helado, gelatina, sopa tibia (no caliente). Evita alimentos duros, calientes, picantes o con semillas.

  6. Evita fumar o tomar alcohol.
    Durante al menos 72 horas. Estos hábitos interfieren con la cicatrización y pueden provocar infecciones.

  7. Limpieza con enjuagues suaves (a partir del día siguiente).
    Puedes enjuagar suavemente con agua tibia y sal después de las comidas, pero solo a partir del segundo día.

  8. Toma tus medicamentos según las indicaciones.
    No suspendas los analgésicos o antibióticos antes de tiempo, aunque te sientas bien.

  9. Si notas algo fuera de lo normal, contáctanos.
    Sangrado abundante, dolor muy intenso o fiebre no son normales. Llámanos o mándanos un mensaje para ayudarte.

Conecta con nosotros y da el siguiente paso hacia tu mejor sonrisa.

¿Tienes preguntas sobre tu tratamiento, quieres agendar una cita o simplemente necesitas orientación?
Estamos aquí para ti.

hola@clinicadlv.com

55 7766 7079

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